Me.

Brilla diferente y eso asusta a cualquiera.




Raquel Reitx.

viernes, 20 de noviembre de 2020

Brasas.

 Vale, esta bien, me he dejado completamente de lado. 

Pero ¿Quién no ha hecho eso alguna vez? 

Estoy cansada, hastiada y decepcionada con el mundo y claramente con mi persona. Pasan los días y no me dedico ni una décima parte de lo que dedico yo al resto. Olvidándome de mi misma. 

La ansiedad se ha convertido en mi compañero y va conmigo desde el comienzo hasta el final de mis días. Me oprime el pecho y me impide respirar. Atormenta  mis noches y se lleva mi sueño. Desvela mi conciencia y mi corazón late a 1000 por hora. La cabeza le acompaña y le guía enseñando las películas que se monta noche tras noche. 

A veces pienso que soy Sena, la princesa guerrera... que puedo con todo y nada me derriba. Lucho contra la vida, las injusticias y la opresión... Pero otras... Soy esa chica sin carisma ni carácter, débil de mente y de forma, incapaz de alzar la voz para proclamar y gritar todo lo que le atormenta.  

Duele tanto, duele verte débil, el llorar y que sientan que no eres tan fuerte. Que tu coraza caiga en plomo y se parta en tantos trozos que jamás puedas volver a reconstruirlos...

Pero por mucho que yo quiera, dolerá, dolerá y quemará tanto... pero cuando ardas resurgirás de las cenizas convertida en fenix. 



Martacm.

jueves, 9 de abril de 2020

Waiting.

Tengo ganas.
Ganas de vivir un amor incondicional. Ese que te absorbe y te escupe en una nube de algodón de azúcar.

Que me rodeen con los brazos y me acaricie el alma.
Que me huela el pelo y me bese la frente. Observar mientras finjo que estoy dormida, como me lleva a la cama y aparta el mechón de pelo que roza mis mejillas.
Sentir sus brazos junto mi cuerpo, para que mi sueño sea placentero cada noche.
Miradas tan intensas que sepamos leernos sin pronunciar palabra.
Encontrarme en una historia escrita por Jane Austen, pidiéndome la mano y encaminarme en mi corcel blanco a un futuro juntos...

Que el tiempo pase, las horas se convierten en segundos y estos se esfumen como el humo del incienso.
Que las fotos no sean capaz de capturar nuestra esencia y sobretodo que no haga falta decir nada para que todo se sepa.

miércoles, 8 de abril de 2020

El oscuro futuro del amor.

Tranquila preciosa.
No todo es un camino de rosas.
Que el nada es de color púrpura y los príncipes jamás han sido azules.
Nos venden un amor de estrellas mientras algunos nacen estrellados.
Nos cautivan las escenas de pasión, las declaraciones y las pedidas de mano.

Pero bonita...

No existen los amores perfectos, ni aquellos que pretenden ser incondicionales.
Los te quiero se esfuman cual cigarrillo se consume entre sus labios.
El miedo se apodera del cuerpo y de la mente huyendo del más mínimo atisbo cercano al amor.
Los cuentos de hadas quedaron atrapados en los libros.
Los príncipes huyeron con sus corceles y las princesas presas en sus extensas torres a la espera de que regresen y las liberen de su cárcel eterna.
Las promesas se convierten en humo y las esperanzas se evaporan.
El futuro queda eclipsado por el engaño, la desconfianza y el anhelo.
Aprendemos a convivir en un mundo donde la soledad nos acompaña de la mano y dormimos aguardando que la paz no escape de nuestro sueño.

lunes, 6 de abril de 2020

You.

Eres mi antidoto.
La cura para esta enfermedad que me azota cada vez que tu no estas a mi lado.
Mi amuleto de la suerte, el trébol de cuatro hojas, la pata de conejo.

Dirás que estoy loca, pero siento que cada segundo que estoy contigo desaparece el dolor, el veneno, la enfermedad.
Cada vez que sonríes, logras detener el tiempo y concederme los mejores segundos que alguna vez tuve en mi vida.

Aunque a veces me conviertas en un ángel caído del cielo, cualquiera sería demonio siempre que seas tu quien gobierne mi reino.
Ni el fuego intenso del averno lograría que pusiese distancia contigo.


sábado, 28 de marzo de 2020

Destino.

Somos destino.

Cuenta una antigua leyenda oriental, que estamos conectados por un fino y etéreo hilo rojo. Unido a nuestros dedos en busca de su extremo, sin importar el tiempo, lugar o circunstancia. Vagamos por la vida buscando a nuestra mitad.
Este no desaparece, no quiebra ni se enreda.

Según los griegos, en nuestro génesis, fuimos concebidos con 4 brazos, 4 piernas y 2 caras.
Pero, temiendo nuestro poder, Zeus nos fraccionó en dos seres, condenándonos a pasarnos la vida en busca de nuestra otra mitad.

Somos situaciones, circunstancias. Somos recuerdos, historias e ilusiones.
Somos todo eso que pasa mientras aguardamos todo lo que nos queda por llegar.



En tiempos de guerra.

Estamos a centímetros.
No puedo tocarte, besarte y ni siquiera puedo oler tu piel. 
Mis dedos no rozan tu espalda y mi tez no se eriza con tu contacto.
Mis labios no desgastan tu cuello y mis ojos no ven como te quedas dormido en mi pecho. 
La proximidad puede enfermarnos, pero quién no caería en esa condena con tal de consumir tus labios. 
El veneno atraviesa los poros y se posa en tus pulmones. La cautela debe adueñarse de nuestro juicio. 
Nos convertimos presos de nuestro propio hogar huyendo de algo etéreo. 
Buscamos la cura aun sabiendo cual es el remedio. 


jueves, 9 de enero de 2020

Lady Camelot.

Creo que hoy voy a contaros un cuento.

La historia trata de una princesa.
Una bella doncella que se enamora perdidamente de un avispado lobo feroz.

Su larga melena rozada su espalda mientras caminaba por los preciosos e inmensos pasillos de su castillo.
Dormía en la torre, allí donde el sol azotaba las largas tardes y contemplaba el amanecer día tras día encontrando respuestas a todas sus incertidumbres.
Una tarde de verano, paseando por los jardines de esa ciudad, conoció al lobo que la acechaba esquina tras esquina buscando su punto flaco para poder atacarla y robarle lo más preciado, su corazón.
La agasajó con ilusiones falsas y " Te quiero" en voz baja.
Su corazón se llenaba de dicha cada vez que la besaba o acariciaba su mano. La agarrafa tan fuerte que incluso le costaba respirar.
Pero tras tanto amor la princesa no sabía que se escondía engaños y promesas de medio pelo.
Las sonrisas y las risas se transformaron en ceniza la cual bañaba cada rincón de su bello castillo.
El sol se heló y el lobo feroz se proclamó el rey.
La bella doncella, encerrada, entre cuatro paredes. Lloraba la ausencia de su amiga felicidad y albergaba la idea de que la luna la rescatase cada noche de esa pesadilla que jamás devió de comenzar.

Una tarde, tras un largo paseo en un verano agotador, a lo lejos divisó una luz, tan bella, tan hermosa que cegaba cualquier mirada.
Era la flor más bella jamás vista.
La rozó con las yemas de sus dedos. Exhaló su perfume y cautivó su alma.
La deseaba tanto que la simple idea de arrebatarle la vida congelaba su alma. Pero una parte entró e su cuerpo y se apoderó de ella.
Lo llamó coraje y le arrebató todo el miedo que paralizaba su voluntad.
Expulsó el veneno, desterró al lobo feroz.
Ahora vive con valentía, con entusiasmo y sobretodo con amor, pero a ella misma.

Sonríe, aunque el sol no azote su ventana, aunque el viento golpeé su larga cabellera.
Se ríe a carcajadas aunque la tormenta esté a las puertas a punto de derrumbar su guardia.

Porque es ella ahora la dueña de su vida.


miércoles, 25 de diciembre de 2019

¿Comenzamos nuevo año?

A veces, cometemos el fallo de enfrentarnos a la realidad como si de un cuento de hadas se tratase.
Buscamos de manera incansable, en cada rincón de nuestra vida todo aquello que nos haga feliz, sin importar que perdemos o porque nos olvidamos de nosotros mismos.
Desde pequeños nos educan para llevar una vida correcta, sin vacilar, sin miedos y con un rumbo fijo.
Forjas tu sentencia.
Nos centramos en las críticas para que estas nos definan poco a poco y nos conviertan en todo aquello que no somos. Damos importancia a lo efímero aparcando y dejando en la cuneta todos nuestros sueños y todas nuestras metas.
Sufrimos los agobios, la fatiga y la ansiedad. Luchamos contra el tiempo y a contra reloj para hacer todo aquello que ya nos han predispuesto.

La vida es aventura, juego, sueños, viajes, cafés a media tarde, media botella de vino. Oler a lluvia, salir con la ropa arrugada, pegarte una siesta de 4 horas y no dormir en toda una noche aunque tengas que trabajar a la mañana siguiente.
La vida son risas, lágrimas, ya sean de felicidad o de tristeza.
Vivencias, inquietudes, anécdotas, kilómetros de carretera y manta.
Golpes, caídas y rasguños.
Amigos, familia y amor.
La vida es todo. Pero nos resistimos al tiempo. Vamos contra reloj.

Vive, disfruta y sobretodo, no te resistas.

miércoles, 13 de noviembre de 2019

Banal.

¿No os ha pasado alguna vez que incluso estando rodeados de mil personas os seguís sintiéndoos solos?
Ni la compañía, ni los abrazos, ni los besos de consuelo logran hacer desaparecer la angustia de no sentirse completo.
En esta sociedad adulamos lo banal y nos convertimos en meros seres que fingen en una vida llena de betún.
Maquillamos la sociedad, las caras bonitas, los filtros de instragram y simulamos tener una vida de cuento de hadas.
No aparecen esas madres, levantándose a las 6 de la mañana, cuidando de tres hijos y resolviendo su vida para que cada uno de ellos tenga algo que llevarse a la boca.
No incluyen a esa joven estudiante que logra su carrera mediante trabajos en un supermercado de la calle de al lado.
Pero aunque tengamos 4 millones de seguidores, 6 cifras de me gustas y 3000 visualizaciones de tus historias, nadie, jamás la conocerá.
Las redes sociales se convierten en un pozo sin consuelo en el que viertes en tus penas tinta rosa y pegas tus grietas con cinta de doble cara.
Te disfrazas de reina para simplemente sentirte ella.
Nos maquillamos, nos camuflamos entre princesas cabalgando en reales caballos de largas colas y color niebla… Pero solo ese breve instante en el que salta el flash.
Luego todo vuelve a su lugar. Seguimos siendo cenicientas pero nuestra hada madrina aún no se ha dignado a aparecer.
Nos quiere puras e inocentes pero lo que ella aun no sabe es en esta vida … Ya nada ni nadie es inocente.

jueves, 19 de septiembre de 2019

De mi para mi.

Querida Carol, hace ya mucho que no te escribo. El tiempo me ha dispuesto tantas piedras en el camino que he construido una casa, un hogar.
He cimentado con mis angustias y mi pesar una morada que me resguarda del frío en mi invierno mas helado y del calor en mi verano más sofocante.
Pero eso no es escusa. El olvido se apoderó de mi y me separé de todo aquello que me llevara a recordar las tristeza que algún día invadió mi corazón.
Se que mis palabras no son nada, pero necesitaba mantenerme al margen de todo por tan solo un segundo.
Pero no voy a venderte nada. Ha pasado mucho.
La vida ha dado un giro y el pirata barba azul, pese a sus intentos por volver a robar lo que un día fue suyo, sigue en el baúl del olvido. Las grietas se apoderan de el pero sigue encerrado bajo llave.
Mis ganas de comerme el mundo crecen y avanzan como los segundos del reloj y me siento cada vez más viva aunque con menos tiempo de vida.
La salud se mantiene en un punto medio y eso, querida Caroline es la mejor noticia que alguien puede tener.
La familia sigue igual, con sus disputas constantes pero queriéndonos mas que nunca. Alejandro incluso me regala algo de tiempo. Te he echado de menos. Tu risa, tus ganas de vivir, tus antojos repentinos y tu energía contagiosa.
Espero que algún día, puedas perdonarme, ya que soy yo la principal culpable de haberme hecho daño.

Sé feliz.
Atentamente... para ti y para mi.
Caroline.

miércoles, 16 de enero de 2019

Capitulo 2. Quizás en soledad encontramos la respuesta.

Son casi cuatro años los que dediqué al que fue por un instante el amor de mi vida.
Mi alma quebrada me quemaba por dentro y sus pedazos me asfixiaban cada noche impidiendo que el sueño lograra rozar mi cama.
Mi dolor se ha convertido en calma y mi angustia en un simple añoro. Tal vez, después de tantas lágrimas desperdiciadas en la ducha mientras ignorabas mi pesar, todas ellas se fueron para no volver más. Escaparon por el desagüe.
Poco a poco los pedazos se van sellando aunque siempre dejando huella. Poco a poco la normalidad se apodera de mi cuerpo y de mi vida para dejarme avanzar. Poco a poco siento que cada vez me olvido algo mas de ti, incluso al pensarte mi corazón ya no palpita en dirección contraria.
He tomado otro camino, quizás en dirección constante sin retorno hacia un sendero intrincado y confuso pero directo a mi satisfacción personal.
Me quieres cada instante menos, me quiero cada segundo más.
A mi vida, a mi trabajo, mis amigas, mi familia...
Soy cada segundo de mi vida que ya no paso a tu lado, un trocito de mi más feliz.
Gracias.

lunes, 14 de enero de 2019

Capítulo 1. Mi piel es el papel y mis lágrimas la tinta.

A veces pienso que los cuentos de hadas no están hechos para gente como yo.
Contemplo cada página como si fuese a sacarme de esta pesadilla y elevarme hasta tocar esa fábula con mis propias manos.
Mis dedos han rozado la tapa, he tenido el placer de advertir el aroma que desprenden sus páginas... Pero pasaste de príncipe a barba azul.
Fuiste el demonio que me atrapó en el averno sin posibilidad de retorno. Fuiste la causa de mi angustia y mi desesperación. Embaucaste mis ojos con tu realidad ficticia de un amor que jamás existió.
Soltaste palabra por palabra escupiendolas entre tus dientes mientras mi corazón se agrietaba con cada una de las letras que salían de entre tus labios. Lo repestiste a voces por si un ápice de esperanza rondaba mi cabeza. Incluso mencionaste mi nombre para que me diese claramente por aludida.
" No te quiero"  enunciaste.
Cada noche sueño con ello. Como si de un duende o un ángel de la guarda se tratase, se posa en mi cama y me induce al sueño en el que tu voz resuena cual eco me persigue antes de despertar.
Lo tenías todo pensado, cavilaste el momento perfecto para poder alejarme cada vez más de ti.
Llevabas meses sin tocarme, sin mirarme con la sonrisa a medias y con tus ojos a fuego en su interior.
Sabía que algo ocurría. Pero en mi mente, el príncipe jamás me defraudaría, venías a salvarme, no a enviarme directa al infierno desde el cual te escribo.
Mis lágrimas se han secado y se han quedado grabadas en mi rostro, como si este fuese esculpido en piedra.
Brotaban entre mis pestañas, bajaban por mis mejillas y se consumían en mis labios. Un sabor amargo.
La sal se apoderó de mi paladar durante días. Ese fue el único sabor que pude apreciar ya que mi mente no olvidaba el de tus besos.
Me arropaste en la despedida con tu piel pero esta congelaba. Quemaba el hielo que desprendía tu cuerpo, incluso tus lágrimas se helaban antes de llegar a tus mejillas.
Entre tus suspiros se filtró un ápice de alivio.
Querías que mi imagen se desvaneciese mientras cruzaba la puerta para que fuese la última vez que divisas mi espalda.
Me sentí sola, abandonada, desahuciada, desamparada, desvalida.
Inerte en un mundo cuyos sentimientos se tratan como al papel que arrugas y reciclas como si fuese insignificante. Un papel que contiene una historia, un epílogo poco prometedor.
No soy esa clase de princesas, no beso ranas, ni transformo bestias.
No visto ropas con finas telas, ni camino entre rosas hasta mi alcoba.
Más bien, soy estilo cenicienta antes de que el cristal formase parte de su zapato.
Pero eso es lo terrible de este mundo cruel. No hay princesas que salven a un rey, ni hay doncellas que luchen contra sus demonios.
Otro capítulo más de este horrible, catastrófico y sombrío apartado de un libro que hasta hoy... no tiene final.

lunes, 5 de diciembre de 2016

Merry christmas.

Bienvenido sea Diciembre. 
Me gusta tu color. 
Bañas las calles de rojo carmín acompañadas de un olor a castañas. 
Las luces nos acompañan cual vigía en la noche para que el retorno a casa sea mas dulce. 

Llega la navidad. Me encanta. 
Siempre he deseado que llegara esta época del año. 
Adoro el olor a navidad, su color, las sencaciones que provocan los adornos en cada calle de mi ciudad. Pero ante todo, me gusta disfrutar de todo esto a tu lado. 
Poder pasear agarrada de tu mano, visitando cada rincón solo para acaparar un recuerdo más en mi mente. Poder deleitarme de tu sonrisa y cara de asombro cada vez que abres un regalo de los mios sin tener la mas mínima idea de que sorpresa habrá detrás de cada paquete. 
Las cenas rodeada de los tuyos. De sus vacaciones, de tu familia con sus virtudes y cada uno de sus defectos, para que nos vamos a engañar. 

Me gustas. Me gusta la navidad. Me gusta levantarme cada mañana y ver las luces de mi árbol. 
Pero sobretodo... me gustan los recuerdos que forjé cada año, junto a los que faltan y deseas volver a ver... porque gracias a vosotros se lo que es realmente la navidad. 

Os deseo a todos y a cada uno de vosotros que disfrutéis, que sepáis aprovechar cada momento junto a los vuestros, sonriendo y sobretodo abriendo regalos. 

Feliz navidad.. 

viernes, 4 de noviembre de 2016

Duelo.

Creí que nunca me atrevería a decir esto. Supuse que jamás me arriesgaría a que de mi boca saliesen estas palabras tan rotas como está mi corazón.
Estoy rota en dos pedazos. Como si fuese porcelana, aunque fijes las dos partes siente hallándose la cicatriz.
Tal vez son las miles de ocasiones en las que me he encontrado sola, en las que me he sentido un lastre, un ancla que obstruye la travesía e impide llegar a tu objetivo.
Me he sentido ausente de tus planes, de tu futuro. Envuelta en duda y en dolor que me desgarran por minuto de lucidez.
La ansiedad me consume como si de un cigarrillo se tratase, con cada calada que das voy llegando poco a poco a mi final, a la boquilla cual amargo sabor me precipita al olvido.
Siento frío. Ya no arropas mis noches con tu piel, ni acaricias con tus besos mis labios.
Solo complaces mi deseo.

Hace unas noches sentí como me ahogaba. Me dí cuenta de que mi muralla caía y te proclamabas vencedor desentendiéndome y celebrando mi derrota.
Siempre pensé que jamás permitiría ahogarme en mi misma, permitiéndome sentirme inferior o suspirar por ti.
He sido fuerte, tenaz, implacable toda mi vida. Jamás descuidé las puertas de mi castillo. Nunca permití que mis fuerzas flaquearan aumentando mis defensas... pero has derribado mis murallas.

No puedo más. Estoy desatendida, enfadada, triste y rota...
Estoy sola.
Pero yo soy la culpable. Es tiempo de tomar medidas.
Es tiempo de cambio.

jueves, 27 de octubre de 2016

Aunque no lo creas, cada año se hace más dura tu ausencia.

Cada día me acuerdo de ti, de tu risa, de tu sonrisa y de tu olor. 
Añoro tus bromas, tus gracias y sobretodo tu pasión.
Cuidábamos de ambas, nos queríamos y el tiempo nos la jugó. 

Han pasado ya cuatro años desde tu despedida y no hay un solo día que no me arrepienta de no haberte dado tantos abrazos como segundos tiene el día. 
Abuela cuanta falta me haces. 
Me enseñaste a querer, a pasar página y a reflexionar aprendiendo incluso a perdonar. 
Fuiste frágil fuera pero en tu interior dura, hercúlea. Has siendo y siempre serás mi heroína, mi pilar base y mi amparo en tiempos de guerra. 
Aun siento y escucho tu voz, en mis sueños, noto tu piel, tus caricias con sabor a caramelo. Noto tus besos de cariño. 
Se que ahora descansas, que tu cuerpo no es tu castigo y que tu alma es más libre que nuca.

Porque puedo verte en las flores de la iglesia junto a tu casa, esas que te encantaban con olor a lavanda. Puedo verte en tu sillón, en tu casa, en cada cono de helado cuyo pico del final iba siempre destinado a tu perro, el que acompaña cada día. 
Puedo verte en cada uno de los botones que tú me enseñaste a pespuntear. 
Puedo verte cada día en cada parte de mi vida por que siempre estarás.

Te echo mucho de menos.

Te quiero abuela. 

jueves, 13 de octubre de 2016

Por ti.

Llega la calma. Como pequeñas gotas de cielo aterrizan cada tarde en la ventana de mi habitación. 
Las oigo aparecer, es como un susurro que te envuelve en una ligera capa que acaricia cada extremidad de tu cuerpo. 
Está aquí el otoño. Con el fino manto de la helada que cerca se encuentra y nos rodea estrechando el cerco cada minuto que muere. 
Y con todo ello, llega tu piel, erizada y gélida. Lo estaba deseando, verte envuelto en una manta al abrigo de mi cuerpo esperando que el calor nos visite y nos calme en estas noches grises.

No me hace falta buscar consuelo. Lo adoro. 
Adoro cada gota de lluvia, las heladas y la frigidez de la noche que te empuja a no dormir sola.
Adoro todo eso, porque en cada uno de los detalles apareces tú. 
Poder arroparme con tu cuerpo, arrimarme a tu calor y abrigarme con tus brazos siempre que el frío venga a visitarnos. 
Incluso la lluvia, espesa e infinita se deleita cada vez que ve besarnos bajo ella. 

Creeme si te digo que añoro y adoro el frío por ti.
Siempre por ti. 

martes, 27 de septiembre de 2016

Welcome Autum.

Como año tras año, estoy aquí para darte de nuevo la bienvenida.
Te presentas como siempre, con chaquetas a destiempo y rondando al invierno que noche tras noche se aproxima con una fina brisa.
Me vistes con duda. El tiempo se vuelve loco.
Pero te he echado de menos. Acurrucarme con una manta viendo anochecer a las 8.
Tener a la luna, más grande que nunca velando en el crepúsculo junto con aquellos aguaceros cuyo ruido alimenta mi sueño.
Mentiría si declaro que quiero que te vayas. Que te esfumes. Porque no hay nada más bonito que dormir al abrigo suyo huyendo del frío.

Aterrizas en forma de hoja adornando cada esquina y huyendo del verano.
Dejas sin abrigo a los arboles, a las calles vacías y a la noche más sombría.
No obstante, os engañaría si no confieso que lo adoro.

Nos rodeas con botas de lluvia, con paraguas de colores y con tardes en el sofá.
Porque pequeña estación, no nos dejes jamás.

Querido Otoño, te he echado de menos.

lunes, 26 de septiembre de 2016

365.

Un año más me hago mayor.
Y siento que no hay nada en mi vida que me llene como debería.
Las dudas me atormentan cada día que se acerca la fecha. No he cumplido ninguno de mis objetivos otro año más.
Cada vez que cierro los ojos y pido un deseo, lo único que quiero en esta vida es ser feliz.
Pasando 365 días puedo confirmar que no he logrado absolutamente nada de todo aquello que me rondada entonces.
Tal vez sea hora de hacer otra lista, de componer otro puzzle y de comprender que no todo es posible.
Y os seré sincera, tengo dudas sobre mi vida. Los trabajos brillan pos su ausencia, me siento incompleta, mi familia cada día está más separada, nos aislamos y nos encerramos en nosotros mismos.
Y en el amor... que os puedo manifestar que me siento inconclusa. Le tengo a él, y logra que mis sonrisas sean eternas cada vez que estoy a su lado. Sin embargo, necesito que me bese cada vez que sepa que no estoy bien, que me abrace fuerte hasta el punto en el que me falte la respiración porque solo así podrá unir mis fragmentos rotos.

Desconfianza, incertidumbre, indecisión...

Otro año más.
Felicidades a mi misma.
Felicidades  Marta.

miércoles, 14 de septiembre de 2016

Verano Prt.1

Querido verano, poco a poco te vas y nos abandonas para no volver hasta dentro de 9 meses.
Te prometo que te echaré de menos. Aunque deteste el calor y las noches sofocantes. Los mosquitos que he de admitir que este año se han coronado junto con las quemadura y las reacciones al sol.
Si, lo se. Después de esto no se como voy a añorarte.

Lo aclararé.
Echaré de menos la brisa de algunas noches en la playa.
Dormir fuera, lejos de casa y sentir la arena bajo mis pies junto con el agua helada del mediterraneo.
Que se vuele la sombrilla y echarte unas risas mientras saboreas un botellín de cerveza helada junto a una amiga y a los pies del mar.
Despertar sin preocupaciones, sin hora exacta de entrada o salida.
Viajar en el coche sabiendo que te esperan momentos únicos que marcarán cada día de las páginas de tu calendario.

Compartir a su lado la toalla, jugar a las cartas expuestos al sol y la marca del bikini que aunque sea fugaz la adoras cada instante que permanece en tu piel.
La sonrisa de felicidad aquel día que desperté en la noche para arroparme con una sábana y tu dormías a mi lado. No ha podido ser mejor.

Por muchos veranos más.
Querido verano. Gracias por volver cada año.

Atentamente. Marta CM.

miércoles, 31 de agosto de 2016

Tal vez un cambio.

A modo de ver mi situación actual tanto física como psicológica he de decir que no me siento con fuerzas de combatirla.
Tal vez sea una simple o leve depresión que me atormenta desde hace tan solo un mes.
Puede que se trate de que no estoy siendo feliz en mi vida sentimental y laboralmente no es que me vaya mucho mejor.

Estoy metida en una relación que se, desde hace mucho tiempo, que no tiene absolutamente ningún futuro.
Será mi inconformismo ante lo que creo que es una falta de cariño sumada a ciertas actitudes que dejan mucho que desear.
Quererle, claro que le quiero pero eso no lo es todo.
Yo necesito sentirme querida, necesito un amor de película en el que te mire contando cada lunar que adorna la cara, si tu mechón se ha escapado de la coleta y el lo devuelve a su estado actual.
Que te acaricie hasta conseguir que te quedes dormida porque a él le encanta verte así.
Sorprenderte con besos inesperados que al mismo tiempo logran mantenerte con la boca cerrada sin conseguir que ni una sola palabra salga de entre los labios.
Habla de ti, de forma tan dulce que se le caiga la baba cada vez que pronuncia tu nombre rodeado de halagos.

Y en cuestión laboral... de eso si que no puedo decir absolutamente nada más.
Vivo en un país rodeado de absurdeces. Donde los políticos roban mientras decenas de comedores sociales son cerrados por falta de ingresos.
En el cual el 93% de los contratos son basura y temporales permitiendo a las empresas echarte cada vez que sientan que no eres un activo necesario para ellos.

En fin. Así va la cosa estando pendiente de cualquier mejora.

domingo, 21 de agosto de 2016

Reflexión.

Ultimamente me siento bastante sola.
No se que me pasa. Estoy apagada, fuera de cobertura y en otra galaxia.
Tal vez no estoy cómoda con mi nueva vida. Sin espectativas, sin un futuro firme en el que centrarme. Sin sentirme en consonancia con el mundo.
Se me pasa miles de veces por la cabeza la idea de huir, de alejarme de todo y conocer algo nuevo. Ganar tiempo.

Otro de los motivos por los que tal vez me sienta tan gris sea que todo el trabajo realizado hasta la fecha no me ha sido recompensado. No me siento fuerte, ni apoyada, y ni si quiera siento que me ayuden a levantarme o a cambiar de color cada uno de mis días.
Tal vez el rumbo y la compañía sean un error.

Es tiempo de pensar en una misma y poco a poco recompensarme. Necesito una vida nueva,



sábado, 7 de mayo de 2016

2.

A veces los remedios mas efectivos son aquellos a los que apenas prestamos atención. Un abrazo que te componga y una tu rompecabezas. Un beso sincero  esos que llenan el alma y te dejan sin aire. Un buenos dias tan profundo que quieras repetirlo el resto de tus días. Pero sobretodo que te digan lo preciosa que estas cada segundo, que valoren tus esfuerzos,  para que los demás tengan una vida mejor. Que te recojan del trabajo y que lo primero que veas sea una sonrisa que te haga olvidar ese duro día.
Que te mimen cuando crees que mas lo necesitas sin tener que pedirlo.
Que te sorprendan de vez en cuando como nunca antes lo han hecho. Y que te acaricien, te envuelvan haciendote la vida mucho mejor.
Solo necesitamos sentirnos queridos.

Sea cual sea tu dolor... Todos son remedios, todos curan y todos llenan el alma.

La gente se obceca pierde el control de la situación y comete errores. Pero el mayor error de todos... es saber cual es el error e ignorarlo.