En la vida hay veces que nos plantemos que merece la pena. Yo os lo diré. Una tarde de invierno depresiva, llorando y desperdiciando un precioso tiempo oír el timbre de la puerta, abrir y... tus mejores amigas aguardan con una película y un bol de helado. Eso son los pequeños detalles que hacen de tu vida un pequeño libro compuesto por verdaderos momentos. Mis amigas, diría que mi vida pero aun pienso que pueden ser algo más. No me hace falta nada si las tengo a ellas. Porque una vida sin amigos, no es una vida.